Más del 80 por ciento no tiene un acceso adecuado a los servicios básicos
Barrios populares: el 40
por ciento de sus habitantes asiste a comedores comunitarios
Un informe hecho en
distintos puntos del país radiografía la situación de vulnerabilidad de esos
vecinos: más del 70 por ciento requiere de alguna asistencia económica estatal.
29 de agosto de 2025 -
00:01
·
. Imagen: NA
Un estudio realizado por
la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ)
y La Poderosa en nueve barrios populares de
distintos puntos del país muestra que más del 40 por ciento de
sus habitantes asiste a comedores comunitarios para poder
alimentarse, más del 70 requiere de alguna asistencia
económica estatal y más del 80 no tiene un acceso adecuado a
los servicios básicos. Además de advertir sobre las condiciones de hacinamiento,
el informe final da cuenta de las diversas problemáticas ambientales que
atraviesan los barrios, en su mayoría vinculadas con la cercanía a fuentes
de contaminación como cursos de agua en mal estado, basurales
o desagües cloacales.
El trabajo se realizó entre
los meses de noviembre y diciembre del año pasado en cuatro barrios del AMBA --Isla
Maciel, Villa 21-24, Barrio Mugica y Los Álamos de La Matanza-- y otros
cinco en las ciudades de Mar del Plata --Las Dalias-- , Córdoba --Yapeyú--, La
Rioja --Virgen Desatanudos--, Corrientes --Mendoza al
Sur-- y Ushuaia --Mirador de Ushuaia--, alcanzando a 1485
hogares que contabilizan un total de 5825 personas.
Sus resultados fueron
presentados este jueves por integrantes de las dos organizaciones. Diego
Mora, del Observatorio Villero de La Poderosa, destacó entre otros puntos
que la encuesta hogar por hogar fue realizada por vecinos y vecinas de
los barrios con el objetivo de recabar información pero además
"hacer una disputa en la agenda que además se pueda
traducir en políticas para vivir dignamente". Catalina
Marino, coordinadora del Programa Derecho a la Ciudad de ACIJ también
indicó que buscaron "disputar relatos oficiales" con
"información que apunte a la incidencia en
políticas".
El informe final lleva el
nombre de "Condiciones de vida en barrios populares" y fue
redactado por el propio Mora y Fernando Bercovich, de ACIJ, con un total de 31
páginas que desagregan diversos datos relevantes sobre la cuestión económica en
los barrios, pero también ambientales y de acceso a los servicios.
En cuanto al primer punto, se recabó que el 41 por ciento de
las familias encuestadas recurre a comedores comunitarios para
poder alimentarse, cifra que se eleva en algunos casos llegando, por ejemplo,
al 60 por ciento en barrios como Isla Maciel y Virgen Desatanudos. El dato se
conecta de lleno con la cantidad de encuestados que reciben algún tipo de asignación
estatal, que llega al 74 por ciento de los hogares. El
informe advierte en este sentido que "esta combinación evidencia una alta
dependencia de redes de apoyo comunitario y transferencias sociales
estatales para garantizar la subsistencia diaria".
Los hogares, además, muestran una "marcada feminización", ya que "la mayoría de las jefas de hogar son mujeres, con más del 60 por ciento, y entre el 50 y el 60 por ciento de los hogares cuenta con al menos un menor a cargo". "Este escenario evidencia una doble vulnerabilidad: las mujeres deben asumir simultáneamente tareas de cuidado y la generación de ingresos", indica el informe.
La cuestión de las
dificultades de la supervivencia diaria se traduce en otro dato ya conocido
pero que el estudio presenta con números concretos: que la expectativa
de vida de las personas que viven en barrios populares es mucho menor
que la del resto de la población. En la presentación se indicó que entre los
encuestados se recabó sólo un 4 por ciento de personas mayores de 65
años, lo que contrasta con el 12 por ciento que arrojó el
último censo nacional para toda la población argentina. En los
barrios populares incluidos en el informe, en tanto, "entre el 20 y el 30
por ciento de la población está compuesto por personas de 14 años o
menos".
Pero el dato no se entiende
sólo por las condiciones económicas de vida, sino también por las
condiciones estructurales y socioambientales de los barrios.
En el primer sentido se observa que en la mitad de las
viviendas encuestadas hay condiciones de hacinamiento, con dos o
tres personas por habitación, población dentro de la que un 10 por
ciento está en "hacinamiento crítico" con más de tres
personas por habitación. El 46 por ciento de las casas encuestadas están
ubicadas sobre calles de tierra, mientras que el 84,1 no
tiene acceso adecuado a los servicios básicos.
En cuanto a la conexión a
esos servicios públicos, el punto más crítico se da en el tendido
eléctrico, ya que el 63 por ciento de las viviendas tiene
una conexión irregular a la red. La mitad de
los encuestados también tiene una conexión informal al servicio de agua,
cuya calidad, por otro lado, fue mal calificada por el 75 por ciento, que
"declaró que el suministro presenta olor, color y/o sabor".
La cuestión lleva a que el 60,6 por ciento de los encuestados se vea
obligado a comprar agua embotellada para el consumo diario pese a sus
precarias situaciones económicas.
El punto de la
contaminación en los barrios es abordado en primer lugar a partir de la
percepción de los vecinos y vecinas, que en un 30 por ciento cree
que las cuestiones ambientales son el problema más
importante de su barrio, mientras que el 53 por ciento asegura que su
barrio está afectado por problemas ambientales. El 50 por ciento de
las viviendas, en tanto, se encuentra cerca de una fuente directa de
contaminación, ya sea en forma de cursos de agua, deshechos cloacales o
basurales. El 57 por ciento asegura que todos los días ve basura
alrededor de sus hogares.
Por último, el informe
también hace hincapié en la falta de establecimientos públicos en
los barrios, como centros de salud o escuelas. En el primer punto, el 22
por ciento de los encuestados respondió que tarda más de una
hora en llegar al centro de salud en el que se atiende habitualmente
por la ausencia de establecimientos cerca de su casa y por la falta de conexión
adecuada de transporte en el barrio. El 28 por ciento indicó
en este sentido que la falta de centros educativos y/o de salud en
las cercanías es uno de los problemas que más afectan a sus vidas cotidianas.
Fuente: Página/12
No hay comentarios:
Publicar un comentario